miércoles, 2 de mayo de 2012

NICARAGUA - Ometepe


18/1/2012 – Bien temprano y acarreando la pereza de madrugar en época de vacaciones, nos dirigimos en el primer ferry hacia Ometepe, la isla volcánica perteneciente a Nicaragua y situada en el centro del lago Cocicolba (llamado también Gran Lago de Nicaragua).

Este lago constituye una importante fuente de abastecimiento de agua dulce, además de albergar numerosas especies animales raras subacuáticas, como los peces sierra y los tiburones de agua dulce.


Esta espectacular isla está formada casi en su totalidad por los conos de dos volcanes: el volcán Concepción (se alza hasta los 1.610 m) y el volcán Maderas ( 1.394 m) que junto con el istmo que los une le da a Ometepe la peculiar forma de “8”, lo que a mucha gente le recuerda a Tahití, al igual que por su orientación cardinal y su origen volcánico.


Nada más llegar a Moyogalpa uno de los núcleos de población más importantes de la isla, y tras encontrar un lugar sencillo pero aseado donde pasar la noche, nos dispusimos a conocer Ometepe junto a Antonio, nuestro agradable (y tras unas horas compañía también querido) guía, quién nos mostró los lugares más emblemáticos al tiempo que nos enseñaba las curiosas leyendas de la zona, tales como la de “Chico Largo” o “Las Ceguas”.


En nuestro recorrido pudimos conocer Charco Verde con sus aguas tranquilas de color esmeralda (donde reside eternamente el “Chico Largo”). Seguimos por la zona de Santa Teresa, las playas de Santo Domingo y llegamos al pie del volcán Maderas, donde emprendimos la caminata hacia uno de sus miradores para poder contemplar las vistas del volcán Concepción en todo su esplendor, a cuyas colinas nos enfrentaríamos al día siguiente.


Por supuesto no podía faltar la parte gastronómica del viaje, y aconsejadas por Antonio degustamos el delicioso pargo con patacones como recompensa a nuestra marcha por el Maderas.



Seguimos el recorrido visitando la finca “Ojo de Agua”, un pequeño lago que sirve como respiradero para el volcán y que según cuentan los aldeanos, sus aguas tienen la virtud de rejuvenecer 10 años a la gente que se baña en ellas…       Resultado: Tan bien nos sentó en chapuzón que Antonio no nos reconoció al salir…  (jejeje)


Para finalizar el día disfrutamos de un atardecer bañado por las aguas dulces que rodean Ometepe, en una de las lenguas de tierra que se forma en la isla al encontrarse dos corrientes opuestas. Sin más palabras para describirlo fue simple y sencillamente, hermoso.
 

Por supuesto no nos podíamos olvidar de nuestro risueño Antonio, quien nos mostró de la mejor manera posible los rincones más bellos de la isla, dejando en un magnifico lugar la reputación de la UGO (Unión de Guias de Ometepe).



1 comentario:

  1. Cocicolba o cocibolca? xD he estado alli hace 25 dias, Fantastico el lugar, los caballos libres por la playa :D una pena no haver podido visitar el volcan maderas.

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